Lecturas en el WC

Desde el equipo de biblioteca se ha pensado que la lectura debe fomentarse en cualquier sitio y momento. Así que a lo largo del curso se seleccionan fragmentos de obras, o pequeños textos y se cuelgan en todos los cuartos de baño del centro, para dar la oportunidad, a aquellas personas que quieran, de amenizar esos actos tan naturales como cotidianos que se realizan a diario en estas estancias. 

Estas lecturas, con cierto aire escatológico y que ya se realizaban el pasado curso, se colgarán simultáneamente en el blog. A continuación la primera de este curso 2019-20, una presentación de Alicia en Juncaland...

La Biblioteca presenta una nueva 

temporada 

de lecturas en los baños…

• A ver, el alumnado de primero Q, por allí, al aula 344. Aquella persona que se retrase se quedará sin cabeza.- Dijo la Reina de Corazones.
• Eso, primero Q, ¡¡sin cabeza!!- Dijo el Rey.

Alicia salió entre la multitud y se dirigió hacia donde indicaban. Una morsa, un dodó, Tweedledee y Tweedledum, un lirón en una tetera, e incluso algunos niños y niñas, parecía que compartirían aula con ella este curso.

• ¡Llego tarde, Llego tarde. A una cita muy importante. No hay tiempo para decir “Hola, adiós”. Llego tarde, llego tarde, llego tarde!

Con un gran reloj de bolsillo, un conejo blanco se abrió paso bruscamente y pasó junto a Alicia, atravesó el patio interior, corrió pasillo adelante y se metió en el aula 334.

En el patio interior muchas emociones invadieron a Alicia, incluso le pareció ver un gato de gran sonrisa metido entre los potos, pero debió ser su imaginación, al momento solo quedaba su sonrisa flotando en el aire. En un instante, esta desapareció…

Se sentaron todos en total falta de silencio. De repente una liebre y un señor con sombrero entraron en el aula. Traían tazas y té para todos.

• Atención, señores y señoritas y señorites, ruido, ¡¡ mucho ruido por favor!! Soy el Sombrerero Loco, vuestro tutor.
• ¿Nuestro tutor?, ¡pero si está loco!
• Oh, eso no lo puedes evitar. Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca.
• ¿Cómo sabes que yo estoy loca?
• Tienes que estarlo, o no habrías venido aquí, un centro con una densidad de población de cinco personas por metro cuadrado…
• En este metro estamos seis, que conste en acta.
• Muy bien, seis es un logro. A ver por favor, chillen más alto, un poco de falta de atención que vamos a explicar las reglas de no-convivencia: no se puede no poder, ni se puede poder tampoco, el que pueda tendrá que pensar en no poder y viceversa. Tampoco se puede entrar, salvo que ya estéis dentro; ni salir, con excepción de los que estén fuera. A los que incumplan las reglas, se les cortará la cabeza. Tampoco se pueden tener dudas, ¿alguna duda? A continuación, vamos a celebrar la feliz no-presentación, pero como hoy es la presentación, tendrá que ser mañana. Pueden irse, muchas gracias por su desatención.
• ¿Irse?, ¡llego tarde, Llego tarde. A una cita muy importante. No hay tiempo para decir “Hola, adiós”. Llego tarde, llego tarde, llego tarde!

Todos en tropel salieron, con el mayor de los alborotos, gran desorganización y escándalo extremo, taponando pasillos y formando montones de personas, amasijos de brazos y piernas, dedos en el ojo y pies en la boca. Unos naipes muy amables les ayudaron a salir, golpeándoles amablemente con sus amables lanzas. Ni que decir que eran naipes de corazones.

• ¡Que les corten la cabeza a todos!, se escuchaba en lontananza.

Alicia esperó a ser la última para salir. Algo captó su atención. Era un libro en el suelo: “Alicia en el país de las maravillas”, con una tarjetita que decía: “léeme”.

Una sonrisa flotaba en el aire, observándola… Parece que la locura ha llegado para quedarse en el IES Juente Funcal.